¡Histórico! Más de 26,000 personas se bautizan simultáneamente en EE.UU.

El pasado Domingo de Pentecostés, Estados Unidos fue escenario de un hecho sin precedentes: más de 26,000 personas tomaron la decisión de ser bautizadas en agua, en lo que se ha reconocido como el evento de bautismo simultáneo más grande jamás registrado en el país.

Bajo el nombre “Baptize America”, esta movilización espiritual reunió a más de 650 iglesias de los 50 estados, uniendo corazones y voluntades en un mismo propósito: declarar públicamente la fe en Jesucristo. El punto central del evento fue Pirate s Cove, California, un lugar emblemático que vuelve a ser testigo de un avivamiento masivo, décadas después de los bautismos liderados por el pastor Chuck Smith durante el Movimiento de Jesús en los años 70, como se muestra en la película “Revolución de Jesús”.

Este año, miles se sumergieron en las aguas en medio de cantos, lágrimas y profunda alegría. “Fue como si la presencia de Dios estuviera allí... algo indescriptible”, compartió Kaili Newby, una de las personas bautizadas.

Para muchos, la experiencia fue más que una ceremonia: fue un encuentro real con Dios. Gabriel, otro participante, sorprendió a su madre al decidir bautizarse. “De no ser por sus oraciones y la gracia de Dios, estaría muerto o en prisión. Esa era mi vida en el Medio Oriente”, confesó, resaltando el poder de la intercesión y el cambio que produce la fe.

Jorge González, quien fue bautizado junto a su hermano, también describió la jornada como un antes y un después en su vida. “Sentí que Dios tocaba cada parte de mi corazón. Era el momento para rendirme completamente a Él”, expresó conmovido.

Los organizadores resaltaron la magnitud espiritual del día. “Lo más hermoso fue ver a la gente encontrarse cara a cara con Jesús”, afirmó Alissa Circle, voluntaria del evento. Por su parte, el pastor Mark Francey, uno de los líderes del movimiento, aseguró: “Esto no termina aquí. Creemos que lo que comenzó en esta playa se expandirá a las naciones”.

El impacto del evento va más allá de los números: revela un despertar espiritual en crecimiento dentro de Estados Unidos. En tiempos donde la incertidumbre y el vacío existencial tocan muchas vidas, miles buscan un nuevo comienzo a través de una relación personal con Dios.

La unidad entre distintas denominaciones cristianas fue fundamental para llevar a cabo esta jornada histórica. En un mismo Espíritu, los participantes vivieron lo que Jesús oró en Juan 17: que todos sean uno. El bautismo, como enseña la Biblia, simboliza morir al pecado y nacer a una nueva vida en Cristo. Y este 2025, el Pentecostés marcó un poderoso recordatorio de que el Espíritu Santo sigue transformando vidas.